11 de febrero de 2016

Generaciones del nuevo siglo: "Los Millennials"


Los cambios generacionales junto a las redes sociales generan un nuevo modelo, junto con nuevas expectativas. 

Sumados a los ya conocidos Baby Boomers, Generación X y Generación Y, se suma esta nueva generación que, además de presentarnos un dinamismo distinto y nuevas formas de trabajo, traen consigo nuevas expectativas sobre lo que desean para su trabajo y su vida.

El desafío de los profesionales de hoy: comprender y adaptar el modelo de negocio a las nuevas fuerzas de trabajo que están surgiendo. De este modo se pueden aprovechar de una manera más eficiente este nuevo recurso, que cada día se acrecenta.

Les dejo un video que habla acerca de esta nueva generación. Aquí verás cómo las nuevas conductas de los generaciones venideras crean un nuevo escenario.

¿Qué buscan los JP de las empresas?



La incorporación de los jóvenes al mundo laboral suele ser un camino difícil. La falta de experiencia cierra puertas, y las expectativas suelen ser altas. Es por eso que los estudiantes y recién graduados tienen una buena valoración de los programas de inserción y los regímenes de pasantía que ofrezcan las empresas. Asimismo, según expertos, "las compañías están siendo maestros, enseñando algunas cosas, pero a su vez están aprendiendo otras de ellos". Hay tres grandes grupos de competencias que se deben tener en consideración: las cognitivas (que tienen que ver con el saber), la intrapersonales (habilidades, capacidades, fortalezas) y las interpersonales (que tienen que ver con lo relacional).

"Hay un dilema que todavía se da y es que las mejores posiciones son para personas con experiencia, pero si no tienen experiencia no pueden acceder", afirma Esteban Morin, gerente general de Latam de Cía. de Talentos. Y agrega: "Pese a que existen programas de inclusión, sigue estando el paradigma de que la experiencia es un valor fundamental para conseguir empleo; así entramos en una especie de círculo vicioso".

Ámbito Biz participó de la presentación de la encuesta "Empresas de los sueños de los jóvenes 2014", que se llevó a cabo en la Universidad Católica Argentina (UCA). El estudio analiza cuáles son y cómo se construyen esas cualidades, además de brindar herramientas para quienes toman decisiones en lo que se refiere al desempeño profesional de los jóvenes y a la "fidelización" de los nuevos talentos.

La muestra abarca a más de 77 mil personas de entre 17 y 26 años, en su mayoría estudiantes que ya trabajan o están buscando empleo, consultados en la Argentina, Brasil, Colombia, México, Chile, Perú y Centroamérica. Sus áreas de principal interés son administración, marketing, ingeniería, recursos humanos y comunicación, entre otras. Los sectores que despiertan mayor interés son bancos y servicios financieros, comunicación, comercio, alimentos y bebidas, tabacaleras, informática, industria, servicios, automotrices y salud.

Está claro que a la hora de buscar empleo, los jóvenes eligen internet, casi excluyentemente en portales web, pero también en redes sociales. El segundo lugar lo ocupan las ofertas que pueden recibir desde las bolsas de trabajo de las universidades, mientras que son pocos los que siguen consultando avisos en formato papel.



DESEOS Y PLAZOS

Algunos de los datos sobresalientes de este estudio están vinculados a los deseos y los tiempos ideales de los jóvenes profesionales. En este último punto, la encuesta señala que la mayoría, un 73%, no espera permanecer más de dos años en el mismo puesto; en tanto que el 15% dice que pretende mantenerse más allá de ese lapso. En cuanto a la estadía en una misma empresa, el 21% cree que lo mejor es hacerlo entre cinco y seis años, el 18% entre tres y cuatro; y el 13% más de 20. En igual porcentaje, un 6%, están quienes sostienen que su ideal es estar menos de dos años y entre 11 y 20. La permanencia, en parte, está ligada a lo que estos jóvenes esperan de las empresas. Valoran sobre todo que les paguen cursos de posgrado, los programas de coaching y/o mentoring, la rotación de puestos y la estimulación de emprendimientos dentro de la compañía, entre otros aspectos. En cambio, los factores que más influyen en sus desvinculaciones -un 45% respondió que ya renunció alguna vez- son la búsqueda de mejores oportunidades laborales, de mayor crecimiento, bajos salarios y beneficios, mal ambiente de trabajo, maltrato de los superiores y la imposibilidad de coordinar el empleo con el estudio. "En general no hay coincidencia entre la realidad de las organizaciones y las necesidades de los chicos", explica Morin. La clave, entonces, es cómo se deben manejar esas expectativas.

CÓMO VEN A LAS EMPRESAS

Un punto interesante surge al analizar qué perciben los jóvenes acerca de lo que las empresas esperan de ellos y lo que realmente pretenden las compañías. Durante la presentación se realizó un ejercicio en el que los directivos coincidieron en marcar como principal cualidad la ética, seguida por la eficiencia, la innovación, la sustentabilidad y, más relegado, el seguimiento de pautas preestablecidas. La entrega de resultados "a cualquier precio" fue prácticamente descartada por los participantes. Sin embargo, los jóvenes encuestados pusieron en último lugar la ética, con apenas un 3%. Creen que lo más valorado por las firmas es la eficiencia y el cumplimiento de las prácticas habituales. El dato llamativo es que la entrega de resultados "a cualquier precio" aparece en tercer lugar con un 19%, seguida por la innovación (14%) y la sustentabilidad (5%). Existe, entonces, una clara dicotomía entre lo que piensan unos y otros. La responsabilidad, según Morin, es de las empresas, ya que son ellas las que no logran comunicar adecuadamente su mensaje.


EMPRESAS DE LOS SUEÑOS

Consultados sobre si tienen una "empresa de los sueños" para desempeñarse, los jóvenes respondieron en un 58% que sí. Los motivos que identifican para elegir esas firmas, y que creen indispensables, son principalmente el aprendizaje y el desarrollo profesional, los desafíos constantes, el equilibrio entre la vida profesional y la laboral, hacer lo que les gusta, una carrera internacional, innovación, buenas relaciones en el trabajo, y los salarios y beneficios. Además, los valores que más admiran son la innovación, la calidad de servicio, el desarrollo de los profesionales y la estimación del personal. Para saber qué ofrecen esas empresas recurren mayormente a personas que ya trabajan en ellas, aunque también indagan en los medios, las redes sociales y las webs institucionales.

También son factores importantes la calidad de los productos y servicios que comercializan y la comparación con entidades similares. Por otro lado, un 24% afirmó que existe al menos una compañía en la que no trabajarían. En este punto sostuvieron que las causas de esa decisión están alojadas en que perciben que no están de acuerdo con los valores que supuestamente profesa la empresa, que explotan a su personal, los bajos salarios y beneficios, el daño ambiental, el maltrato a los empleados o el mal clima laboral, no estar de acuerdo con el producto que ofrece, mala reputación, la forma de trabajo, o simplemente porque no les interesa una industria en particular.


LÍDERES

Otro tema sondeado por la muestra es el liderazgo. En un 73%, los jóvenes argentinos aseguraron no tener un modelo a seguir. Se trata del porcentaje más alto en comparación con el resto de la región. Como cualidades indispensables de un líder, las respuestas apuntan a la iniciativa, la inspiración y la motivación a otros, coherencia entre la palabra y la acción, demostrar integridad y honestidad, colaborar con el trabajo en equipo, resolver problemas y analizar situaciones, y conducir a resultados, entre otros puntos. En la presentación se remarcó que un líder no es necesariamente un jefe, a quien se le debe brindar resultados.

De la encuesta surgió un top ten de líderes que encabezó el para Francisco, seguido por Steve Jobs (Apple), Bill Gates (Microsoft), la presidente Cristina de Kirchner, su par uruguayo José Pepe Mujica, Mark Zuckerberg (Facebook), Nelson Mandela, Larry Page (Google) y el entrenador Josep Guardiola. Entre los presentes surgió una discusión: ¿Por qué no hay empresarios argentinos admirados por los jóvenes? Las especulaciones fueron diversas, pero principalmente apuntaron al bajo perfil que acostumbran a cultivar los ejecutivos nacionales y a una idea de que en general el hombre de negocios tiene una imagen negativa en algunos sectores de la sociedad. Cabe señalar que en los ranking de otros países de la región, como Brasil, México y Chile sí figuran empresarios locales, mientras que la Argentina es la nación donde, según la encuesta, menos ocurre esto. Y algunos de los presentes señalaron que parece ser "exactamente inversa la escala de valores por la que los jóvenes eligen un líder a la que suponen que utilizan las empresas para elegirlos a ellos". "¿Vale la pena revertir esto?", fue el interrogante que surgió entre las mesas. La respuesta fue que sí. Sin embargo, también se remarcó que en general muchas marcas tienen valoración positiva de la gente por lo que hacen o producen, independientemente de que sus cúpulas no sean conocidas por el público en general.

Sobre este punto, Morin respondió a Ámbito Biz que hay muchos factores por los cuales los jóvenes no se identifican con potenciales líderes locales. "El más obvio, que no sé si es el más fuerte, es la cuestión cultural de ver hacia afuera del país. La otra es que los empresarios argentinos son cultores de un bajo perfil", sostiene. Y añade: "A esas personas que podrían estar ocupando un lugar de admiración, porque sus empresas sí son admiradas, nadie las conoce. Hay como un mito instalado, esa frase que dice: 'La plata no se hace trabajando', entonces el que llega a ocupar cierto lugar parece sospechoso". Morin cree que esta postura de los hombres de negocios es contraproducente para las propias compañías. "Cuando trabajás como marca empleadora y querés instalarte como un lugar donde los jóvenes quieran trabajar, las historias de vida de quienes trabajan allí son clave. Si quiero gente que ocupe un rol de liderazgo, tengo que mostrarle a los que lo están haciendo ahora y que vean que ésa es la posibilidad que tienen, que quieran llegar ahí y que se inspiren en ellos", concluye.

Fuente: Ambito.com 
Por: Matías Ortega